Por María Fernanda Piedra Fuentealba,
abogada, autora de «Basura Cero: como decirle adiós a la basura y estar en paz con nuestro planeta».
El Solarpunk es un movimiento artístico y una visión que encuentra sus bases en subgéneros literarios de ciencia ficción, tales como el Steampunk y Cyberpunk. Busca oponerse al presente e imaginar un futuro optimista en el que estemos libres de la amenaza climática y la contaminación, a través del uso de la tecnología y las energías renovables. En este futuro se da una coexistencia armónica entre personas, animales, plantas, insectos y tecnología. Los barrios integran a individuos de todas las edades, culturas y estratos económicos, y todos comparten celebraciones y el cuidado de los niños y mayores. Se compra a granel y hay eventos de reparaciones y zurcido, entre otros. La idea de cooperación sustituye a la de competencia. Es también, el fin del capitalismo.
Orígenes del Solarpunk:
En 2008, un blog llamado Republic of the Bees publicó un post llamado From Steampunk to Solarpunk, que conceptualizó al Solarpunk como un género literario inspirado en el Steampunk. En el artículo el autor destaca entre otros, al barco Beluga Skysail, un buque de carga híbrido que utiliza la potencia de la vela para complementar los motores de la nave marítima. Luego en 2014, el post en Tumblr de Miss Olivia Louise hizo que la palabra tuviera una cierta estética, al incluir imágenes modificadas de Art Nouveau y describir “un mundo en que los niños crecen siendo educados en tecnología y también en cultivo de alimentos y otras habilidades, y las personas han vuelto a apreciar artesanos, desde canteros y herreros, hasta modistas y joyeros”. Este post fue luego referenciado a finales del 2014 por Adam Flynn en Solarpunk: Notes toward a manifesto, donde el autor detalla lo difícil que es ser un futurista sub 30, viendo cómo el mundo se sumerge en el Cyberpunk además de haber ahora una presencia permanente de crisis climática. El Solarpunk para él es la única alternativa en contraposición a la desesperación o el negacionismo. Envuelve las ideas de ingenio, independencia y comunidad. El sufijo punk tiene sentido porque se opone a nuestro mundo actual…Finalmente, un grupo denominado The Solarpunk Community publicaron l Un Manifiesto Solarpunk en españo en 2019, que reitera lo que se ha escrito sobre el temapero de forma más sucinta, y caracterizan al núcleo de Solarpunk con una civilización sostenible;”un mundo post-escasez, post-jerárquico y post-capitalista donde la humanidad se ve como parte de la naturaleza y las energías limpias sustituyen a los combustibles fósiles”.
Solarpunk online:
En Youtube, el canal de Saint Andrewism cuenta con 52.2k suscriptores. Los videos allí publicados son de estilo informativo, y mezclan imágenes, gráficas y citas de libros, acompañadas de una voz masculina joven en inglés. Los más populares tratan temas como Rethinking Human History (Repensando la historia de la Humanidad), Anti-Capitalism is Capitalist (Anti-capitalismo es Capitalismo) y What is Solarpunk? (¿Qué es el solarpunk?) En este último el narrador lo define como “mi fusión favorita de arte y política (…) que pone énfasis en la sustentabilidad medioambiental, el autogobierno y la justicia social. Es un movimiento que mira más allá de las limitaciones del capitalismo y más allá de la brecha actual entre los humanos y la naturaleza. Es un futurismo que se centra en las cosas por las que deberíamos tener esperanza, en lugar de lo que deberíamos evitar.” El video muestra dibujos y fotografías de tecnología para fines edificantes, como drones que bombardean semillas y hornos solares.
En Reddit, la plataforma social que reúne a usuarios según sus intereses, pasiones y hobbies, existe la comunidad Solarpunk – hope for the future (esperanza para el futuro) con 45 mil miembros. Fue creada en noviembre del 2014 y en ‘about’ se lee sobre “todo lo que implica imaginar un futuro positivo, hasta su creación real, pasando por la estética, el afrofuturismo, arte, las cooperativas, el bricolaje, la restauración ecológica, ingeniería, ficción especulativa, el ecofuturismo, la jardinería, domos geodésicos, arquitectura verde, diseño verde, energía verde, prácticas indígenas, comunidad intencional, espacios de creación, ciencia de materiales, música, permacultura, reparación cafeterías, energía solar, sostenibilidad, plantación de árboles, urbanismo, voluntariado, impresión 3D…
Los usuarios del foro postean memes, fotos, preguntas y hay temas que se discuten semanalmente. Por estos días dentro del tópico de actividades/DIY, hay preguntas que se dejan planteadas para que los usuarios comenten al respecto. Las interrogantes son del tipo ¿Plantaste árboles? ¿Construiste algo genial? ¿Hiciste arte? ¿Conectaste con personas de ideas afines en tu comunidad? ¿Cómo van tus proyectos de ayuda mutua / comedor de beneficencia / sindicalización? ¿Escribiste música o historias inspiradoras? ¿Encontraste algo que valga la pena mientras buscabas comida o buceabas en un contenedor de basura?
El o la usuario Maneanlendil respondió publicando una reflexión sobre la bicicleta, señalando que es un medio de transporte que carece prácticamente de regulación, es incompatible con los tacos, no requiere del pago de un seguro para su uso, no exige licencia a su conductor, la puedes ‘cargar’ con tu determinación y lo que sea que hayas comido al desayuno, es probablemente uno de los vehículos más eficientes en términos de ‘combustible’, va tan lejos y tan rápido como tu cuerpo lo permita, no precisa un estacionamiento, no necesita de cinturón, si alguien robara este objeto, su precio es bastante bajo por lo que se podría comprar otra de inmediato, físicamente mejora al ciclista, es entretenido andar en ella, tiene un impacto medioambiental mínimo, una colisión con otra bicicleta es poco probable que resulte en muerte y si las ciudades fueran diseñadas en base a este vehículo, todos estarían ok. ¿Por qué el automóvil es visto como el símbolo supremo de libertad?
En Instagram, el hashtag #solarpunk lleva a la cuenta @CYBRmagazine, la cual tiene 37,7k seguidores y se describe como la revista del futuro. En el feed del medio digital es posible ver entre otros, fotografías de escenarios robóticos, de arquitectura y transporte que podrían existir en el año 2070 en nuestra Tierra. La última y octava edición física de la publicación que juega con la realidad aumentada, incluye temas como la fisión (no fusión) nuclear, la moda digital sustentable según Daniella Loftus, Subzero Carbon y las máquinas que secuestran carbono, y qué tan verde es el Hyperloop.
Una cultura Solarpunk:
Referentes fílmicos y literarios a los cuales se les ha asignado retroactivamente el género Solarpunk -ya que el término se popularizó en 2014- incluyen La Princesa Mononoke de Hayao Miyazaki (1997) y el libro The Fifth Sacred Thing de Starhawk (1993). El primero es una película de animación nipona ambientada en un Japón del período Muromachi, y se centra en la lucha entre los guardianes sobrenaturales de un bosque y los humanos que profanan sus recursos, todo desde la óptica del príncipe emishi, Ashitaka. El segundo es una novela que describe un mundo ambientado en el año 2048 después de una catástrofe que ha dividido a Estados Unidos en varias naciones. Los protagonistas viven en San Francisco y han evolucionado en dirección a Ecotopía, siendo una economía sustentable, utilizando energía eólica, agricultura local, etc. San Francisco se presenta como una ciudad mayoritariamente pagana donde las calles han sido redefinidas por jardines y arroyos, nadie muere de hambre o está sin hogar, y el consejo de defensa de la ciudad está formado principalmente por nueve mujeres mayores que «escuchan y sueñan». La cultura honra su diversa mezcla de razas, religiones y herencias. Sin embargo, hacia el sur, una nación fundamentalista cristiana abiertamente teocrática planea librar una guerra contra los san franciscanos. El libro explora los eventos antes y durante la lucha subsiguiente entre las dos naciones, enfrentando la utopía y la distopía.
De acuerdo a la revista Vice, el Solarpunk ha tomado fuerza en Brasil, ya que allí se publicó la primera antología o colección de ficción Solarpunk el año 2012. Por otro lado, la escritora e investigadora Ana Rüsche incorpora el Solarpunk en su trabajo; en su novela A telepatia são os outros (2019), la protagonista viaja a Chile donde aprende sobre la conservación de semillas, un tema importante en el país de la autora, donde la gran mayoría del maíz es transgénico.
En agosto de 2021, la marca Captured Carbon Studio y sus crayones hechos en base a emisiones de dióxido de carbono, fueron incluidos por la BBC en un artículo de negocios como un ejemplo Solarpunk. El proveedor del CO2 es Expedition Air, una marca que ha estado trabajando con artistas para incorporar este gas de efecto invernadero en objetos cotidianos y esculturas, de manera de lograr que productos y arte se conviertan en sumideros de carbono.
Este año se organizó por primera vez la Solarpunk Action Week, en la cual durante siete días individuos comunes y corrientes se organizaron para hacer activismo y comunidad. En Inglaterra una cabina telefónica abandonada fue convertida en una librería de semillas. En la misma línea, Saint Andrewism ha señalado que el guerrilla gardening (la práctica de plantar vegetación en espacios públicos sin permiso de la autoridad), el food forest o forest garden (que busca imitar los ecosistemas en la naturaleza) también son soluciones Solarpunk que puede realizar una comunidad y confieren un sentido de conexión entre vecinos.
¿Y cómo suena este movimiento? En Spotify hay una playlist Solarpunk cuya descripción dice: “Sin esperanza, no queda nada más que desesperación”.