¿Te has preguntado alguna vez cómo curaban y trataban las enfermedades los Kawésqar? Este pueblo, originario de la zona austral, tuvo que aprender a vivir en un clima muy desafiante, con constantes lluvias y bajas temperaturas. Obligados a moverse constantemente para encontrar alimento, se ha constatado que su metabolismo es hasta 200% superior al que tenemos nosotros actualmente. ¿Cómo lo hicieron, qué medicina utilizaron? Acá te lo contamos.
Los Kawésqar -mal llamados alacalufes-, son un pueblo nómade y canoero originario de la zona Austral de Chile, se movieron dentro del territorio kawésqar (desde el Golfo de Penas hasta el estrecho de Magallanes, llegando incluso al sudoccidente de Tierra del Fuego). Dadas las condiciones climáticas de la zona, con fuertes lluvias, bajas temperaturas e incesantes vientos, era recurrente verlos siempre arriba de su hallef (canoa). En ellas recorrían lugares donde hubiera abundancia de mariscos o donde se pudiera cazar lobos marinos o huemules. Se cree que utilizaban la totalidad de recursos animales como alimento.
Por esa razón, en el libro “Medicina Ancestral de los Pueblos Originarios”, la arqueóloga francesa Dominique Legoupil y otros investigadores “comparten la idea de una superioridad en cuanto a la adaptabilidad fisiológica de los Kawéskar, ya que se ha constatado en su metabolismo una actividad de entre un 150% al 200% superior a la presentada comúnmente entre los occidentales, presentando mayor temperatura corporal y por ende dándoles la ventaja de resistir mejor las bajas temperaturas”.
Es por eso que se considera que la alimentación era parte fundamental de la salud y medicina de este pueblo, ya que los mantenía sanos, sin embargo, al enfermar, lo típico era que cada persona se cuidaba a sí misma.
El ayuno y la sudoración eran las dos cosas que los Kawésqar realizaban como forma de enfrentar los primeros síntomas. Para lo segundo, se quedaban en su choza y se cubrían con varias pieles cerca del fuego, elevando de esta manera su temperatura.
A pesar de que, como en a mayoría de las cosmovisiones indígenas, se creía que había enfermedades o dolencias producidas por fenómenos naturales o causada por fuerzas o poderes malignos, para otras usaban plantas medicinales, que con el tiempo han sido estudiadas y hoy conocemos todos sus beneficios.
Acá te mostramos algunas de las que utilizaban que hoy también puedes encontrar en el país (sobre todo si vives en la zona austral):
- La rapa (Apium prostratum Labill) o ámtak en kawésqar. Sus hojas y raíces tienen propiedades antipiréticas (para la fiebre) y diuréticas (aumenta la secreción y excreción de orina). Se toma en infusión contra los gases intestinales, gota, artritis, reumatismo y escorbuto. Es también utilizada para las infecciones, afecciones respiratorias, dolor de garganta y como refrescante.
- El senecio (Senecio smithii y Senecio trijurcatus) o jeqáqa en kawésqar. Era utilizado como cicatrizante vertiendo su jugo calentado sobre las heridas y cubriéndola con cataplasma de hojas también calentadas al fuego. También se utilizaba para tratamientos contra la sarna.
- El calafafe (Berberis microphylla) o čaulájek y wajamáskar en kawésqar. Sus frutos eran recolectados para la alimentación. Hoy se conoce que ayuda a reducir el dolor y prevenir las inflamaciones debido a sus propiedades anti-inflamatorias. También sirve para el tratamiento y la prevención de hongos, pues posee bondades anti-fúngicas. Además, es una buena fuente de antioxidantes y vitamina C.
- El canelo (Drimys winteri) o saltáxar entre los kawésqar. Se usaba como infusiones, lavados y aplicaciones en quemaduras y heridas. Actualmente, se le conoce una gran cantidad de usos y propiedades: diurético, purgante, anestésico, antiescorbútico, desinfectante, trata reumatismos y calambres, sus hojas y corteza tratan enfermedades de estómago, úlceras, enfermedades del corazón y su corteza contiene gran cantidad de vitamina C.
- La zarzaparrilla (Ribes magellanicum) se utilizaba para el dolor estomacal, como depurativo de la sangre, para bajar la fiebre y contra problemas de circulación, corazón y alergias.
- La ortiga (Urtica maagellanica Juss,), en infusión se utilizaba como expectorante, diurético, depurativo y astringente. Actualmente, está considerada un magnífico depurativo y diurético, además de astringente, hemostático, mineralizante y estimulante del sistema circulatorio.
- Los frutos de la frutilla chilena (Fragaria chiloensis) son comestibles y la infusión de la planta se usa en casos de indigestión, hemorragias o diarreas; la infusión de sus hojas y raíces eran ingeridas luego del parto o para limpiar las vías genitales.
- La murtilla (Empetrum rubrum), es un excelente antioxidante comestible. Actualmente, se han realizado investigaciones que revelan su capacidad antiinflamatoria, analgésica y cicatrizante.
- Con golpes de ramas de chaura (Chaura Gaultheria mucronata), se aliviaban los dolores de cabeza; sus frutos son comestibles. Los mapuches también la utilizaban para tratar inflamaciones, como regenerador, desinfectante e incluso para controlar el acné.
- Las bayas del chilco (Fuchsia magellanica) se consumían y la infusión de sus hojas tenían efectos diuréticos, antiinflamatorios, antiespasmódicos, reducía la temperatura y disminuía la presión sanguínea; la infusión de sus hojas y flores sirven para interrumpir la menstruación y como refrescante.
Fuentes:
- Kawéskar en Memoria Chilena
- Libro Medicina Ansestral de los Pueblos Originarios Mapuche- Huilliche, Kawéskar, Yagán de Carlos Vega Cacabelos
- Libro: Medicamentos Herbolarios Tradicionales. 103 Especias Vegetales. Gobierno de Chile.