En Chile existen registros que señalan que incluso antes de la llegada de los españoles, el tejido era una de las técnicas artesanales más difundidas (se realizaban tejidos con lana de camélidos teñida con colorantes de origen vegetal y mineral). Por estos días y con el fin de visibilizar y preservar este oficio, que producto de la migración campo – ciudad fue disminuyendo, es que el artista Javier Barriga y la Fundación de Artesanías de Chile crearon el mural «La Tejedora», en una de las esquinas más emblemáticas.
Pero ¿quién es la tejedora? Se trata de Fresia Ganga (73), una artesana de la precordillera de Linares, región del Maule, quien pasa sus días dedicada a trabajar en su telar mapuche, en el cual teje chaños. «Fresia es una de las pocas artesanas que sigue tejiendo chaños, pieza tradicional en la cordillera, con la que se cubre al caballo para amortiguar el peso y roce de la montura, pero que también sirve al jinete para protegerse del frío cuando pasa las noches al aire libre», expresó a Radio PAUTA, Claudia Hurtado, directora ejecutiva de Artesanías de Chile.
“Conocer a Fresia hace que el proceso sea más humano. Este mural es un homenaje a quienes, como ella, comparten un espacio muy íntimo que es su casa y su oficio”, comentó el artista.
La obra, que contó con la aprobación y el apoyo de los vecinos del barrio y del Consejo de Monumentos Nacionales tiene un tamaño de 5,75 por 8,20 metros, y está ubicada en las afueras de Casa Velasco, la esquina de Santo Domingo con Mac Iver, donde además se encuentran las oficinas de Artesanías de Chile.
Con esta obra se espera dar a conocer el hermoso arte de tejer e incentivar a las nuevas generaciones a practicarlo y difundirlo. Todo esto, con la señora Fresia como ícono de los maestros de la cultura chilena.