Cuando empezamos a realizar nuestras primeras consultas de Tarot a personas que no conocemos, en aquellos momentos en los que salimos de nuestra zona de confort (leer las cartas a conocidos y familiares), es cuando aparecen nuestras dudas, nuestros miedos ¿Sabré hacerlo bien? ¿Estaré fluido/a? etc. Estas son circunstancias normales, son miedos naturales que con la experiencia y el rodaje irán desapareciendo.
Hay varios tipos de miedos en la consulta de Tarot y el quedarse en blanco, es uno de los más frecuentes. Si esto sucede, lo primero que tenemos que hacer es repasar internamente que hayamos hecho bien los pasos de la consulta (¿la pregunta era clara? ¿Nos hemos concentrado en la pregunta?) si hemos seguido bien el protocolo, entonces lo que estamos interpretando es correcto y con una buena actitud podremos desvelar e interpretar la lectura correctamente.
Quedarse en blanco o bloquearse: Esto es lo que llamamos “pánico escénico”, esto sucede cuando estamos empezando y nos sentimos inseguros. En este caso lo que tenemos que hacer es cerrar los ojos un momento, respirar, poner los pies firmes en el suelo y recordar que nos hemos preparado, que tenemos los conocimientos y recursos necesarios para pode hacer la lectura. Podemos decirle al consultante que necesitas un momento para concentrarte. Y cuando los abrimos empezamos paso a paso siguiendo el protocolo de interpretación, posición por posición y al cabo de un ratito ya estarás fluyendo bien.
Esto sucede cuando hacemos una visión global y queremos verlo todo desde un principio y rápido. Si vamos paso a paso, posición por posición o empezando por buscar la carta clave y mirando, vemos que vamos interpretando poquito a poquito hasta que recuperamos la tranquilidad.
Hay unos puntos que son básicos y fundamentales para poder frente a los miedos de la consulta. Estos puntos pueden ayudarte:
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Buena formación porque esta te da la seguridad y el método del que podrás cogerte cuando lo necesites, especialmente en situaciones difíciles. Reciclarte y leer, hace que tengas más herramientas y esto te facilita la consulta.
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Un buen rodaje en la lectura e interpretación te da seguridad y fluidez, de aquí la importancia de practicar con personas de confianza antes de lanzarte a las lecturas con desconocidos. Una buena actitud es imprescindible para hacer una buena consulta y sobre todo para poder superar cualquier dificultad.
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Una actitud interna que hace que hagas las lecturas con una buena predisposición interior, una actitud de entrega y de escucha a los demás teniéndolos en cuenta. Una actitud de concentración para hacer las cosas bien hechas, estar presente y en conciencia.
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La ética, buenos valores y una buena práctica hará que te sientas seguro/a de tu labor y te dará fuerza interior.
Espero que con este escrito hayas visto que no eres la única persona que tiene miedo ante sus primeras consultas. Deseo que estos miedos te lleven a superarte y a buscar salidas, que te hagan más fuerte y más profesional.
A mí me gusta terminar con esta frase “Si amas y respetas al Tarot, el Tarot siempre te responderá”